Diccionario unidireccional de la prensa madridista

Canguelo: Término popular en la temporada 2008-2009; dícese de lo que sentían aficionados y equipo culé cuando el Madrid logra ponerse a menos de ocho puntos del Barça líder, jugando éstos como los ángeles y aquellos como aburridos diablillos. Evítese el mal uso de aplicar dicho término a lo que pudiera haber sentido el entorno madridista al ver que pasaban las jornadas y el Barça continuaba mandando, vivo en todas las competiciones, mientras el Madrid se mantenía sólo segundo y siendo eliminado sucesivamente de las competiciones en liza.

Depender de uno mismo: expresión moderna que define el hecho de que el Madrid, a dos puntos del Barça recién comenzada la segunda vuelta de la temporada 2009-2010, y con el partido Madrid-Barça por jugar, puede pasar de lo que haga el equipo culé, porque ganando todos sus partidos sería campeón. Absténgase el uso de esta expresión para reflejar que exactamente lo mismo le pasa al Barça, aunque pudiera pensarse que por seguir siendo líderes también serían campeones ganando todos sus partidos. Véase entrada para Presión.

Política: actividad despreciable que en ningún modo puede relacionarse con el fútbol... cuando está implicado en ella el presidente del Barça Joan Laporta. Hay rumores de que si dicho presidente tuviera una ideología diferente a la que profesa el rechazo de tal actividad no sería tan profundo. La cuestión es que este rechazo tiene que ver con el hecho de que para muchos un presidente de equipo de fútbol sólo debe ser eso, y no debe tener ningún rédito en otras actividades derivado de su cargo deportivo. Por supuesto, el que el presidente del Madrid fuera en su momento dirigente en un partido político concreto, o el que presida una empresa desconocida para el gran público hasta que tomó posesión de la presidencia madridista, o el hecho de que otros presidentes como Jesús Gil prosperaran económica y/o políticamente a expensas de su cargo deportivo no tiene nada que ver con la lamentable actitud de Joan Laporta.

Presión: dícese de la sensación que produce en el Barça el hecho de ver al Madrid provisionalmente a dos puntos. Se han observado usos incorrectos de la palabra, por ejemplo para referirse al hecho de que el Madrid está obligado a ganar algo tras una temporada de éxitos culés, tras la inversión realizada en jugadores, o a que si el Barça gana sus partidos el Madrid no puede perder ni un sólo punto.

Rendirse antes de jugar: dícese de lo que hacen jugadores próximos rivales del Barça cuando provocan en el partido anterior una tarjeta amarilla que les permite cumplir una sanción de suspensión ante el equipo blaugrana y estar disponibles en un subsiguiente encuentro ante un rival más directo, por ejemplo en la lucha por eludir el descenso. No debe usarse el termino cuando un jugador del Madrid, o próximo rival del Madrid, haga lo mismo; ahí está claro que el jugador es inteligente y se reserva para partidos más importantes.

Rivales (difíciles): Neologismo creado para la temporada 2009-2010; úsese para crear la esperanza de que el Barça perderá puntos al visitar campos de equipos complicados durante la segunda vuelta. Término inaplicable al hecho de que el Madrid ya ha visitado estos campos, ha perdido puntos en alguno de ellos y que además ha perdido puntos con otros rivales en teoría más accesibles, o a que esos rivales presuntamente difíciles van a viajar al Bernabeu y podrían restarle puntos...

Rivales (fáciles): dícese de los equipos a los que el Barça se enfrentó hasta noviembre de la temporada 2008-2009, cuando iba líder indiscutible con nueve puntos de ventaja. En una paradoja lingüística, dichos equipos no eran tan fáciles cuando jugaban con el Madrid... una jornada antes.

Villarato: grito de guerra popularizado por el periodista Alfredo Relaño, usado por el entorno madridista cada vez que el Barça gana un partido y sigue por delante del Madrid, aunque se ha observado una tendencia a un uso en otras circunstancias variadas, desde el hecho de que el Atlético de Madrid elimine al Racing de Santander en la Copa, o a las designaciones de árbitros para el Mundial de Sudáfrica... no se descarta que el exabrupto acabe siendo usado cada vez que se hable del asesinato de Kennedy. Los orígenes del término no están claros y se pierden en la noche de los tiempos bajo extrañas teorías conspiratorias, y no se sabe si tal grito era usado para enardecer a los jugadores del Madrid o como gesto de frustración ante la superioridad culé. Hay rumores fundados de que tal grito podría estar relacionado con otros del ámbito lingüístico blaugrana, que, en sorprendente analogía, eran usados cuando el Barça iba por detrás del Madrid; consúltese en diccionarios de la prensa culé términos como Franco, Jose Luis Plaza o mano negra.

Adeu i bona sort
Tant se val d´on venim